27/3/10

Maya Deren

Sus películas son como extracciones del mundo onírico, en el cual nos desenvolvemos cada noche, y del cual regresamos cada mañana, reconfortados por soñar aquello que no vivimos, lo que deseamos, o incluso lo que más tememos.
Es realmente asombroso cómo Maya Deren, consigue entrar dentro de nuestra cabeza y extraer esos fragmentos de sueños surrealistas, de imágenes impactantes, de mirarnos a nosotros mismos desde fuera de nuestro cuerpo, de correr sin avanzar, de perseguir algo sin acanzarlo…
¿Es el surrealismo algo que todos llevamos en nuestro más profundo ser, pero que solamente algunos son capaces de expresar? Realmente estas películas nos gustan porque nos sentimos de alguna manera identificados con estas imágenes del subconsciente, aunque no nos demos cuenta de ello.

Por eso, os invitamos a soñar despiertos con Maya Deren y su “Meshes of the afternoon”.

17/3/10

Olafur Eliasson

Olafur Eliasson nació en Copenhague en 1967, aunque vive y trabaja en Berlín. Los materiales que usa van de lo efímero-natural (agua, luz y calor, aire…) a lo industrial (acero, plásticos, motores). Sus obras son sublimes y armónicas imitaciones de la naturaleza que provocan una profunda impresión estética.

Todo ello es tan complejo en su organización como sencillo de experimentar, y su resultado es la excitación de múltiples combinaciones de ideas junto con reminiscencias de emociones vividas que funciona como canal, como pasillo que conduce armónicamente a varios niveles de juicio sobre la propia percepción.
A continuacion unos fragmentos sobre alguna de sus reflexiones:

Los modelos son reales
"El espacio no existe simplemente en el tiempo, es del tiempo. A menudo, se olvida o se reprime esta condición, pues generalmente la sociedad occidental todavía está basada en la idea de un espacio estático no negociable.
A menudo, se olvida o se reprime esta condición, pues generalmente la sociedad occidental todavía está basada en la idea de un espacio estático negociable.
Cuando se piensa en los entornos como estables, tendemos a perder un sentimiento de responsabilidad por los medios en donde nos movemos. El espacio se convierte en un fondo para la interacción más que en un coproductor de interacción. Lo que se produce es, de hecho, un movimiento doble: la interacción del usuario con otra gente coproduce el espacio que, a su vez, es un coproductor de interacción.
Dado que en general los objetos no son estáticos, tampoco lo son las obras de arte. Éstas existen en múltiples relaciones inestables que dependen tanto del contexto donde se presentan como de la variedad de respuestas por parte de los visitantes.

Hago que la construcción sea accesible a los visitantes con el fin de incentivar su conciencia de que cada obra de arte es una opción o un modelo. De este modo, las obras de arte son sistemas experimentales y las experiencias de éstas no se basan en una esencia que se encuentra en las obras en sí, sino en una opción activada por los usuarios.
Estamos siendo testigos de un cambio en la relación tradicional entre realidad y representación. Ya no evolucionamos del modelo a la realidad, sino del modelo al modelo, al tiempo que reconocemos que, en realidad, ambos modelos son reales. En consecuencia, podemos trabajar de un modo muy productivo con la realidad experimentada como un conglomerado de modelos. Más que considerar el modelo y la realidad como modalidades polarizadas, ahora funcionan al mismo nivel. Los modelos han pasado a ser coproductores de la realidad.

En mi práctica artística trabajo tanto con modelos analógicos como digitales, modelos de pensamiento y otros experimentos que corresponden al modelo de una situación. Todo modelo muestra un grado diferente de representación, pero todos ellos son reales.
La idea de que el mundo consiste en un conglomerado de modelos conlleva un potencial liberador puesto que hace posible la renegociación de nuestros entornos. Lo que tenemos en común es que somos diferentes."





14/3/10

Taller STADSLAB in Ukraine



La oficina de arquitectura en Rotterdam llamada STAR strategies + architecture. (www.s-t-a-r.nl) nos ha enviado información sobre un taller de arquitectura a nivel europeo.
Con el programa de postgraduado STADSLAB (www.stadslab.eu) de los Países Bajos han organizado una Masterclass de una semana (11-17 de abril) en Ucrania, en una ciudad cerca de la costa llamada Melitopol.

Durante el taller se pensarán estrategias sobre el desarrollo del parque más grande de Melitopol para convertirlo en la imagen de la ciudad. Se trata de una estrategia inteligente que beneficiará a la ciudad y canalizará su gran potencial.
Buscan sobre todo gente de toda Europa.

Información general:
-Duración= 11-17 de abril
-Precio= 750€ (todo incluido_ alojamiento, tren nocturno Kiev-Melitopol / Melitopol Kiev, etc.) lo que no se incluye es el viaje desde el país de origen del participante a Kiev.






9/3/10

Clarence Schmidt y la Casa de los Espejos



Clarence Schmidt (1897-1978) compró cuando a penas tenia 31 años un terreno en las montañas de Catskill cerca de la ciudad de Woodstock. Desde que se asentó en aquellas montañas comenzó una actividad artística muy alejada de la ortodoxia predominante; desarrolló su propia idea de la creatividad. Para algunos, arquitecto intruso; abuelo hippie para otros, viejo loco… muchos son los calificativos dedicados a este creador cuyo trabajo comenzó a principios del siglo XX como cantero y escayolista. Lo cierto es que Schmidt comenzó a construir una cabaña conocida como Journey`s End; en ella ya ensayó la construcción con materiales de desecho y de poca calidad como traviesas de ferrocarril, cortezas de árbol o viejas planchas de vidrio, en esta cabaña, que vendió poco después, pasó veranos enteros durante los años 30. Posteriormente comenzó la construcción de la Casa de los Espejos mediante troncos, cortezas, ventanas de antiguos edificios, pinturas baratas, multitud de clavos oxidados, piedra del sitio y muchos otros materiales encontrados por el mismo Schmidt. Levantó su casa a lo largo de los años, la casa fue creciendo como un ser vivo, de carácter vulnerable e incompleto. Schmidt se valía de sus manos, ayudado de andamios que disponía alrededor de la casa y que posteriormente consolidaba y entraban a formar parte de este conjunto de fragilidad técnica.
La casa llegó a alcanzar 7 plantas con 35 habitaciones, todo ello conectado con multitud de galerías, porches, pasillos, excavaciones en el terreno, escaleras o pasarelas construidas a lo largo de los años con una evolución claramente centrífuga, atendiendo a los parámetros del lugar. El interior de la casa era bañado por la luz natural proveniente de las claraboyas; y ahí dentro se podía oír el sonido de la naturaleza, el viento, los pájaros… o divisar el bonito paisaje en total armonía. En 1968 la primera casa de los espejos quedó destruida por las llamas pero la volvió a construir hasta que en 1971 un nuevo incendio destruyó la nueva casa. Mientras construía la segunda vivienda, empezó a forrar de papel de plata las ramitas del bosque, creando el llamado bosque de plata.
A la pintoresca imagen que tenía la casa por su peculiar forma de construcción, se le unió la multitud de objetos que Clarence Schmidt fue colocando en el exterior y el interior de la vivienda: muñecos, cornamentas, juguetes rotos, flores de plástico, bicicletas antiguas, ramas de árbol, estampas, altares, radiadores, guitarras, ventiladores, camas viejas, neumáticos y un largo etcétera. Toda esta amalgama de objetos formaba un laberinto, unido en conjunto por una multitud de espejos dispuestos en un jerárquico caos.
Clarence Schmidt encarnaba la imagen de artista introvertido e inaccesible que creaba su arte, fruto de un enigmático mundo interior y alejado del artista mediático que expone en museos; a la vez que su obra se convirtió en un ejemplo de arquitectura insólita como las torres de Simon Rodia en Los Angeles, el Palacio Frances de Ferdinand Cheval o más recientemente La catedral de Mejorada del Campo de Justo Gallego.

2/3/10

Sachiko Kodama

En las esculturas de Sachiko Kodama parece que vemos florecer una naturaleza artificial, éstas últimas se mueven, crecen, se apagan, vuelven a resurgir…

Se trata, sin duda, de un verdadero espectáculo para el ojo humano. Parecen objetos irreales, intangibles, y sin embargo, Sachiko nos demuestra que son totalmente lo contrario, y que podemos observarlos con asombro e incluso influir en su movimiento.

Estas instalaciones explotan la dinámica expresiva de los líquidos a través de las formas y movimientos manipulados a través de computadoras. Los líquidos que utiliza son lo ferrofluídos, un aceite mineral que en su composición contiene moléculas de hierro. Esta característica hace que este líquido pueda ser manejado por campos electromagnéticos, y he aquí donde entra el arte de Sachiko.
La artista diseña programas informáticos que envían señales a unos electroimanes que a su vez dibujan las formas en los ferrofluídos. Estas formas suelen ir acompañadas de la música de Philip Glass en algunas ocasiones. En otras ocasiones, sin embargo, son los sonidos de los espectadores u otros grabados por la artista los que crean el ritmo, ya que este tipo de líquidos siguen impulsos externos y se mimetizan a partir de lo que perciben en su entorno.

La realidad es que estas esculturas dinámicas nos atrapan en sus redes, hacen que nos mantengamos expectantes ante su baile, respiran vida, son únicas.
Para los que seais de San Sebastian, teneis la oportunidad de visitar una de sus obras en Tabakalera. La exposición se llama “sueños de silicio”, y reune obras muy interesantes y sorprendentes, a decir verdad es una de las mejores exposiciones a las que hemos asistido, ya que es interactiva y las obras participan con los visitantes. Muy recomendada.